sábado, 20 de diciembre de 2014

MOTIVACIÓN


   Una motivación se basa en aquellas cosas que impulsan a un individuo a llevar a cabo ciertas acciones y a mantener firme su conducta hasta lograr cumplir todos los objetivos planteados. La noción, además, está asociada a la voluntad y al interés. En otras palabras, puede definirse como la voluntad que estimula a hacer un esfuerzo con el propósito de alcanzar ciertas metas.

  Si deseas tener una buena vida, la mejor habilidad que puedes llegar a adquirir, es el poder de motivarte a ti mismo. Debes mantener el espíritu sin importar que tan desalentadora puede ser la situación. La automotivación puede resultar ser el antídoto para los problemas del día a día, cuando tenemos problemas tendemos a perder la motivación y caer en el conformismo, la pereza y la procrastinación.

  También hay que tener presente que ordenar tu estilo de vida de forma que ser productivo sea algo continuo, y así tener que buscar la motivación lo menos posible, esto se puede lograr haciendo algo que te apasione o creando hábitos que sean productivos y la concentración en lo que hacemos.

  Cuando necesitamos un impulso que nos motive para dar un extra a continuación veremos unos consejos que nos servirán para eso:

1. Vuelve al ¿Por qué?: el centrarse en una tarea aburrida no lo hace atractiva. Debes dar un paso atrás y analizar su motivo, de forma que te apetezca más hacerla.

2. Empieza por 5: empieza a trabajar por 5 minutos, esto puede ser el empujoncito que necesitas.

3. Busca lo que te desmotiva: no puedes avanzar si no encuentras y aíslas la razón por la que no estas motivado. ¿Cansado tal vez?.

4. Busca a un compañero: busca a alguien que te motive cuando te dé pereza.

5. Lee libros: no solo de autoayuda, sino de cualquier tipo que te aporte nuevas ideas. Las nuevas ideas mantienen los engranajes de tu mente en marcha, así ésta arranca antes cuando quieras trabajar en tus tareas.

6. No hay problemas pequeños: el peor enemigo de la motivación es un pequeño problema que te bloquea. Trátelo como si fuera uno grande.

7. Construye sobre el éxito: el éxito atrae al éxito. Las victorias te motivan para casi todo. Un cumplido de un compañero o el acabar dos tercios del trabajo antes del mediodía te pueden convertir en una fuerza devastadora. Provoca el encontrarte con estos pequeños éxitos para que se conviertan en la motivación del después. Lo puedes hacer estructurando listas de tareas, poniéndote tareas sencillas a primera hora del día o dándote a ti mismo una afirmación.


   





No hay comentarios:

Publicar un comentario